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martes, 9 de mayo de 2017

MARIÑEIROS DE FOZ: Xosé Penabade, Xesús da Xacoba e Xesús Castiñeira.



Do libro Foz a xanela dos nosos devanceiros. P. 59

Neste artigo imos falar de tres mariñeiros de Foz que alcanzaron certa sona grazas aos medios de comunicación. Sabemos, porque o sabemos, que non eran os únicos mariñeiros focegos pero a falla de documentación, polo menos en prensa, que é na que traballamos, impídenos levar a cabo un estudio de outros focegos traballadores do mar.

Hoxe imos falar de Xosé Penabade, Xesús da Xacoba e Xesús Castiñeira.

Xosé Penabade.

De Xosé sabemos moi poucas cousas. Preguntando a persoas coñecedoras do tema dinme que Penabade son os do Cotarelo e os de Patarroxa, eu, na miña ignorancia, non podo afirmar nin negar.

O que si podo dicir é que a primeira noticia que atopei sobre Xosé Penabade data do ano 1895. O seguinte documento que imos transcribir fai referencia á sociedade formada polos empresarios Antón Freire e Francisco Junquera, ambos de Vilanova de Lourenzá, cos mariñeiros Penabade e Florencio Martínez, ambos de Foz, que tiña por fin a pesca da sardiña, mellor será que o leamos:
En la villa de Foz, a doce de marzo de mil ochocientos noventa y cinco. Reunidos don Francisco Junquera y don Antonio Freire, vecinos de Villanueva de Lorenzana, asi como Don José Penabad y don Florencio Martinez, que lo son de esta villa, por el último recivi cuenta de los ingresos y gastos que hasta la fecha hizo el Trainera ( Peral) de la que son socios por partes iguales y las que por unanimidad aprobaron de las que resulta un deficid de doscientos siete reales y setenta y cinco centimos, habiendo adoptado por la sociedad los siguientes acuerdos:

1º.- Hacer un desenbolso de ochenta pesetas por individuo para las abentualidades que puedan surgir en la 1ª temporada de sardina y que aprorata se satisfaga el deficid de los doscientos siete reales y setenta y cinco centimos.

2º.- Que cada vez que la trainera vaya al mar se le abonará por gastos de administración al Martinez, seis reales y al Penabad por patronearla diez, siempre que haya sardina y no habiendola yendo a la Mar ganará el Penabad ocho reales en lugar de los diez y demas el Penabad al rendir cuentas se le dará el cinco por ciento de lo liquido a repartir.

3º.- Quedan facultados el Martinez para hacer todo cuanto considere necesario y redunde en beneficio de la sociedad lo mismo que el Penabad pertenezca en sus funciones.

Y abiendose encontrado conformes todos lo firman dandole toda la balided que en derecho pueda tener”.

As condicións laborais nas que traballaban os nosos mariñeiros eran bastante penosas, pero como sempre acontece, poden ir a peor. Algo diso aconteceu no noso Foz. O endurecemento das condicións laborais e a redución do salario recibido son as causas que motivan que un grupo de mariñeiros de Foz realicen unha manifestación no ano 1895. Atopamos esta noticia no xornal El Correo de España, no seu número do 25 de agosto. Tamén atopamos referencia a esta manifestación no xornal El Eco de Galicia: órgano de los gallegos residentes en la Repúblicas Sud-Americanas, nº 138, de data 20 do agosto de 1895. Non fomos quen de atopar referencia documental a esta manifestación na prensa española. A noticia sacada do primeiro dos xornais mencionados di así:“Manifestación frustrada: Dicen de Foz, que unos cuarenta tripulantes empleados en la pesca de sardina que en la ría de aquella tienen establecida en compañía los señores Don Benito y Don José Rodríguez, trataron de celebrar una manifestación por que no se les aumentaba sus jornales respectivos.
Enterada la benemérita de dicho puesto personose en el lugar donde los manifestantes se hallaban reunidos, obligándoles a que se retirasen, a lo que sin otras consecuencias accedieron, desistiendo de tan hostil actitud.
Añaden que el motivo que les indujo a reunirse con objeto semejante había sido porque la compañía Rodríguez empleara en las embarcaciones otros operarios por menos sueldo dejando a los manifestantes, casi en su mayoría, reducidos a la miseria.
El juzgado municipal de Foz, instruye las primeras diligencias sumariales por tal motivo”.

Imaxinámonos que Xosé Penabade sería un deses mariñeiros que se manifestaban.

Xesús da Xacoba.

Tal vez do que menos sabemos. Descendentes seus aínda conservan o nome “da Xacoba”, como apelativo familiar.

Si sabemos algo deste home é gracias ao cronista oficial de Mondoñedo, don Eduardo Lence Santar, que, aparte de ser un amante de Foz, tamén presumía de ser amigo de Xesús e de Xosé Penabade.
No xornal Vida Gallega, do seu número do 5 de decembro de 1923, don Eduardo escribía un artigo titulado Traiñeiras de Foz e nel cóntanos o seguinte:Se dedican a la pesca en Foz una motora, seis lanchas de vapor, siete traineras y más de veinte botes y lanchas.  La motora y las lanchas  de vapor van con frecuencia a la altura de Navia y Luarca, en Asturias, llegando muchas veces al cabo de Peñas. En el puerto entran barcos de 300 toneladas. No entran de más porque la ría está por todas partes llena de arena. Sucede con fecuencia que las traineras y lanchas al regresar al puerto no pueden vencer el enorme oleaje de la barra y tienen que refugiarse en Tapia, ya que en Ribadeo tampoco pueden entrar.
¡ Que peligros y sin sabores pasan los marineros! ¡ Pobrecillos! ¡ Bien miserable y criminal es el que los explota! ¡Y sin embargo, son muchos, muchos los que viven a cuenta del sudor y de la vida de los brazos trabajadores! ¿ Qué marinero gana lo que en justicia debe ganar? Tal vez ninguno. Son muchos los hombres de Foz que sirven de tripulantes en barcos españoles, franceses, ingleses y americanos. Raro es el marinero que no recorrió la mayor parte de los puertos de Europa y aún de otros continentes. Entre los marineros que más han viajado figuran mi amigo Jesús de Xacobo y Penabade. Jesús es hombre valiente y listo.
¡Que historias me tiene contado en su casa del Campo! Estuvo en todas las partes de Inglaterra, Francia, Holanda, Rusia… Recorrió las principales de América y Asia. Habla el inglés y sabe de memoria la mar de pasajes de la Biblia protestante. Hoy es cocinero del vapor Rosario, de Avilés.
Penabade afirma rotundamente que en una ocasión hallándose en aguas del Brasil, oyó cantar, por el lado de estribor, la Serena de los mares. Dice también que la Serena, de medio cuerpo para arriba, es mujer, y de medio cuerpo abajo, pescado con conchegas. Y añade: la Serena es muy decente, pues no traba, agás que la insulten. Cuando era mujer, su madre le echó una soberbia y desde entonces anda anfibia por el mar.”

Na anterior noticia nótase o cariño que don Eduardo lle profesaba a Xesús da Xacoba. Se no ano 1923 Penabade era o que afirmaba ter escoitado a serea, no ano 1939 o protagonista desta historia era Xesús da Xacoba. Así o podemos ler no xornal El Compostelano, no artigo que don Eduardo publicaba o 28 de xullo dese ano : “
 “En Foz contan que o mariñeiro Xesús de Xacobo, indo pra Bos Aires, oíuna cantar unha noite preto d’a costa d’o Brasil”.


Xesús Castiñeira Ramos.

Xesús Castiñeira nas penas do Escairo.
Rematamos coa figura de Xesús Castiñeira Ramos. Del sabemos que no ano 1929  as forzas vivas de Foz solicitan unha recompensa e un recoñecemento polo papel que xogou no salvamento do Chacartegui. Segundo nos conta o xornal El Progreso “ha cundido la idea de solicitar de los Poderes públicos una recompensa para el marinero Jesús Castiñeira. (…) el mencionado Castiñeira arrojóse al mar sin temor al encrespado oleaje que había hecho zozobrar a la chalupa del vapor Chacartegui y con harto y noble desprecio del peligro que su vida corría, buscó hasta el fondo para sacar a flote el cuerpo del desgraciado José Pontes Verdes, quien, a pesar de los esfuerzos realizados, fallecía momentos después”.(El Progreso, 1929, 17 febreiro).

Vexamos agora como nos relata o xornal El Progreso o naufraxio da lancha auxiliar do Chacartegui: “Hoy, a las nueve de la mañana, llegó a la boca de este puerto el vapor Chacartegui y a fin de entrevistarse con los prácticos para cerciorarse de si el estado del canal permitía la entrada, lanzó al agua una chalupa tripulada por el capitán y dos marineros.
Al intentar atravesar la barra, un golpe de mar volteó la embarcación y arrojó fuera de ella a los tres hombres.
Unos pescadores que en la playa reparaban sus artes, diéronse cuenta de la tragedia e inmediatamente se dispusieron a salir en auxilio de los náufragos con dos motoras.
Cuando llegaron al punto en que la pequeña embarcación había zozobrado, el capitán había ya conseguido tomar tierra a nado, y una de las motoras, mandada por Manuel Fraga, recogió a otro que se mantenía aferrado a la quilla d ela chalupa con manifiestos síntomas de asfixia.
El tercero, después de repetidas exploraciones, fue descubierto, ya en el fondo, por la tripulación de la motora mandada por Pedro Fraga, teniendo que descender a buscarlo, con exposición de su vida, uno de los marineros llamado Jesús Castiñeira.
Una vez entierra, pudo comprobarse que el desgraciado había dejado de existir. Se llamaba José Pontes Verdes, era soltero, natural de Corme.
El capitán del Chacartegui, es hermano del capitán del Diciembre, que está anclado, desde hace días, en este puerto, quien con la natural ansiedad se dio cuenta de la situación de los náufragos y contribuyó a su salvamento, en una de las motoras”. (El Progreso, 1929, 6 de febreiro).

Referencias a este acto de valor aparecen tamén na prensa sudamericana e así no xornal El Correo de Galicia: órgano de la colectividad gallega en la República Argentina podemos ler esta noticia no seu número do 31 de marzo de 1929, da que tan só daremos conta do seu final, pois o resto xa o coñecemos, onde se nos di que “si de algo sirve nuestra voz, únase a las muchas que justamente solicitan para Jesús Castiñeira tan preciado y merecido galardón”

Descoñecemos se lle chegaron a dar esa medalla, o que si sabemos é que no ano 1933 aparece como vicepresidente da asociación do Pósito de pescadores de Foz: “por dimisión de toda la directiva, se procedió a la votación nominal de los que habían de sustituírla, resultando elegidos: presidente, don Agustín Freire, celador del puerto jubilado; vicepresidente, don Jesús Castiñeira; secretario, don Ramón Salgado Toimil; vicesecretario, don Serafín Fernández; tesorero, don Balbino López; vicetesorero, don Tristán Alonso; vocales, don Antonio couto, don Jesús Lestegás, don Pedro López Pérez y don Eliseo Méndez”. (El Pueblo Gallego, 1933, 14 de marzo).
Ao ano seguinte xa ocupaba o cargo de presidente da citada asociación: ““ayer hemos tenido el gusto de saludar al presidente del Pósito de Pescadores de Foz, don Jesús Castiñeira, y el secretario del mismo, nuestro querido amigo y corresponsal en dicha villa don Ramón Salgado Toimil”. (El Progreso, 1934, 31 de marzo).

A derradeira noticia de Xesús en prensa data do ano 1957, nela dásenos conta do seu falecemento: “ha muerto el pescador Jesús Castiñeira, popular en todo el litoral cantábrico. Se jugó varias veces la vida en salvamento de náufragos.
En la villa costera de Foz ha fallecido uno de los más populares y respetados pescadores, Jesús Castiñeira Ramos, que contaba setenta y siete años de edad. Se dedicaba a la pesca desde los catorce años, a excepción de unos cuantos que estuvo embarcado como tripulante en un viaje de cabotaje. Era conocido en todo el litoral Cantábrico; nunca tuvo medios de fortuna y su pesca de bajura, ala que se dedicó enteramente, proporcionaba alimentos para sus ocho hijos. En su larga vida profesional, siempre de intachable conducta y honradez, este viejo marinero llevó a cabo varios actos heroicos, entre ellos el salvamento de tres náufragos d eun buque de cabotaje naufragado en cuya acción se jugó la vida, asíc omo el salvamento otra vez, de dos marineros, cerca de Foz. En una ocasión el barco que él  mandaba, ocupado por siete tripulantes, zozobró a causa de un fuerte golpe de mar”. (Imperio: Diario de Zamora de Falange Española, 1957, 24 febreiro).


 
Castiñeira, de pe e boina, no seu bote Marita.



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